Oymyakon, el lugar habitado más frío del planeta Tierra
Oymyakon es un pueblo de unos 500 habitantes situado en el noreste de Rusia, en la República de Sajá, cerca del Círculo Polar Ártico. Es conocido por ser el lugar habitado más frío del planeta, con una temperatura récord de -72,1ºC registrada en 1926. Su nombre significa “agua que no se congela”, en referencia a un manantial termal cercano que era usado por los pastores nómadas.
Una vida muy dura
La vida en Oymyakon es muy dura debido al clima extremo. En invierno, el día dura solo unas 6 horas y el mercurio de los termómetros se congela. Los habitantes tienen que calentar los motores de los coches con antorchas o mantenerlos encendidos todo el tiempo para evitar que se estropeen.
Todo se congela
Las tuberías, la tinta y el papel higiénico también se congelan si no se mantienen a una temperatura adecuada. Los animales domésticos, como las vacas y los caballos, tienen que vivir en establos con calefacción. Incluso las pestañas y las lágrimas de las personas se congelan al salir al exterior.
No se puede cultivar nada en el suelo
La alimentación de los habitantes de Oymyakon se basa principalmente en la carne de caballo, el pescado y los productos lácteos, ya que no pueden cultivar nada por la falta de suelo y el corto período de crecimiento. El plato típico es la stroganina, que consiste en virutas de pescado crudo congelado al aire libre. También consumen bayas recolectadas en verano y té caliente con leche . Algunos alimentos se conservan bajo tierra o en cuevas naturales para evitar que se congelen demasiado.
Una gran capacidad de adaptación y resistencia al frío
Los habitantes de Oymyakon tienen una gran capacidad de adaptación y resistencia al frío. Están preparados biológicamente para combatirlo, con un metabolismo más rápido y una mayor grasa corporal. También tienen una cultura y unas tradiciones que les ayudan a sobrellevar las condiciones extremas.
Habitantes hospitalarios y orgullosos
Son hospitalarios, solidarios y orgullosos de su pueblo. Celebran fiestas como el Día del Polo Norte o el Día del Renacimiento del Sol, cuando este vuelve a aparecer después de un largo período de oscuridad. También practican deportes como el esquí o el hockey sobre hielo.
Un paisaje impresionante
A pesar de las dificultades, Oymyakon también tiene sus atractivos y ventajas. El pueblo cuenta con una escuela, una oficina de correos, una tienda, una iglesia y un museo. El paisaje es impresionante, con montañas nevadas, bosques de abedules y lagos helados. El manantial termal ofrece un lugar para relajarse y disfrutar del contraste térmico. El pueblo también recibe algunos turistas aventureros que quieren conocer el lugar más frío del planeta habitado y experimentar su forma de vida.