Argentina
La fusión de influencias europeas e indígenas da forma a la reconocida gastronomía argentina, destacada mundialmente. La carne de res argentina, distinguida por su sabor y calidad, junto con los venerados vinos del país, añaden renombre a la escena culinaria. El asado, emblemático plato preparado con cortes de carne premium a la parrilla, encabeza las delicias. Empanadas rellenas y choripanes son populares, mientras que en regiones como Cuyo se disfrutan el locro y la carne de llama. El norte ofrece sabores intensos con humitas y ají de gallina, contrastando con la Patagonia, donde el cordero asado, salmón ahumado y mariscos frescos son joyas culinarias.
Colombia
Colombia cuenta con una exquisita y diversa gastronomía, enriquecida por su fértil tierra y climas variados. Desde la región caribeña hasta los Andes, la Amazonía y los Llanos, cada zona refleja sus singularidades y la influencia de diversas culturas que han dejado su huella a lo largo del tiempo. Los afros, árabes, chinos, caribeños, españoles y más, contribuyen a una rica mezcla de sabores. Con maíces criollos, frutas tropicales, pescados, café, cacao y mucho más, la cocina colombiana es una narrativa culinaria arraigada en la historia, ofreciendo una experiencia inigualable.
Francia
La gastronomía francesa destaca por su refinamiento y sofisticación, siendo referente de la alta cocina mundial. Reconocida como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, es un arte culinario donde la delicadeza se fusiona con quesos y vinos de calidad. Platos icónicos como las crêpes, las galettes, el camembert, y el champagne son representativos. El pato, preparado de diversas maneras, y especialidades regionales como caracoles de Borgoña, bullabesa, ratatouille, quiche de Lorena y Kouign-amann, aportan diversidad y exquisitez a la culinaria gala, haciendo de la experiencia gastronómica francesa un deleite inigualable.
Italia
La gastronomía italiana, reverenciada globalmente, se destaca por sus ricas historias y tradiciones culinarias. Con ingredientes frescos y calidad inigualable, la pasión culinaria italiana trasciende en cada bocado. La pasta, desde los spaghetti hasta los raviolis, personifica su icono culinario, acompañada de salsas de tomate, ajo, aceite y hierbas frescas. Cada región aporta su distintiva cocina: Lombardía ofrece la cotoletta alla milanese, mientras Piamonte brinda trufas blancas y gorgonzola. En el sur, Campania destaca con la pizza napolitana, Sicilia con pasta alla norma y cannoli. El pollo al marsala del sur, junto a quesos como pecorino y mozzarella, completan esta apreciada y diversa gastronomía.
Japón
La gastronomía japonesa, más allá de su exquisito sabor, se destaca por su estética, por ser saludable y la maestría en técnicas culinarias, fusionando lo tradicional con lo innovador. El washoku, la cocina tradicional nipona, es reconocido como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, destacando su respeto por la naturaleza y sus lazos comunitarios. Desde el sushi y ramen hasta tempura, yakitori y okonomiyaki, esta cocina se basa en arroz y pescado fresco, realzada por algas marinas, sake, tofu, té verde y soja. Platos como tonkatsu y sukiyaki complementan esta experiencia culinaria única, culminando con el icónico mochi como postre versátil.
Marruecos
La rica fusión de influencias bereberes, árabes y mediterráneas dota a la gastronomía marroquí de una diversidad única. El país se destaca por sus sabores intensos y especiados, así como por su amor por los dulces y el té. Cada región tiene sus propias especialidades; Marrakech es famosa por su té de menta y pasteles de almendra, mientras que Tánger destaca por sus pescados y mariscos frescos. Ingredientes clave incluyen cordero, vaca, especias como comino, canela, jengibre y cilantro, junto con frutas y verduras locales. El couscous y el tajín son platos emblemáticos, mientras que la pastela fusiona lo salado y dulce con maestría.
México
México, más que un país gastronómico, se erige como todo un continente culinario. Sus estados y regiones ofrecen una diversidad gastronómica que varía radicalmente. La Cocina Tradicional mexicana, reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad, es un pilar de identidad, cohesión social y desarrollo comunitario. Integrando recetas prehispánicas, cocina indígena, criolla y europea, el maíz, chile, frijol, nopal y jitomate son emblemáticos. Además del icónico taco, los chilaquiles, la torta ahogada, el pozole y los chiles en nogada revelan la riqueza de sabores en este país.
España
La tendencia en los restaurantes españoles se inclina hacia la vuelta a productos frescos, de temporada y locales, marcando una pauta clara en la gastronomía. La sostenibilidad se convierte en el epicentro, sin importar el tipo de cocina, desde mediterránea hasta asiática. La iniciativa de la Guía Michelin, con sus Estrellas Verdes, refuerza la valoración de lo local, llevando a restaurantes, independientemente de su tamaño o renombre, a considerar las repercusiones de sus elecciones culinarias dentro y fuera de la cocina. La conexión cercana con productores ha llevado a los clientes a indagar sobre el origen de los ingredientes y las personas detrás de su cultivo.
Perú
Perú, especialmente Lima, se ha consolidado como una meca gastronómica mundial, atrayendo a turistas que buscan más allá de las maravillas como Machu Picchu y la impresionante Ciudad Blanca de Arequipa. Su diversidad de ecosistemas -Andes, desierto, costa y selva-, junto con variadas altitudes, convierten a Perú en un destino culinario de primer nivel. La cocina peruana criolla, con sus ceviches y causas limeñas, se entrelaza armoniosamente con la gastronomía chifa, resultado de la migración china, y la cocina nikkei, que fusiona la influencia japonesa.
Tailandia
Tailandia, punto de encuentro entre India, China y Oceanía, fusiona sus influencias culinarias para dar forma a una identidad gastronómica única. Sus cuatro regiones, caracterizadas por sabores ácidos, salados, picantes y dulces, destacan por sus particularidades. El noreste deleita con carnes a la parrilla y arroz pegajoso, mientras que el norte, influenciado por Laos, Myanmar y otras culturas, presenta platos únicos. El sur, con su abundancia de curry, refleja la influencia musulmana. En la región central convergen sabores de todo el país, creando una experiencia culinaria rica en chiles, ajo, galanga, hierba de limón y más, acompañados de arroz, pescados y vegetales.