Compromiso y recompensa
Establecer una cita para correr con un compañero ofrece la motivación extra necesaria, especialmente en días difíciles. Después del ejercicio, premiarse con un almuerzo especial o un pequeño capricho es el incentivo perfecto para hacer que el esfuerzo valga la pena y mantener la constancia en el entrenamiento.
Elige el calzado adecuado para el invierno
Elige cuidadosamente tu calzado para correr bajo la lluvia. Un calzado que no apriete es esencial para evitar ampollas. Algunos prefieren una talla más grande. Busca zapatillas que se ajusten al arco de tus pies, y si estás indeciso, opta por un ajuste neutro. Evita las zapatillas con mucha malla, geniales para el calor pero no para la lluvia y el frío.
Correr sobre nieve y hielo
Para correr sobre nieve y hielo, elige zapatillas de trail con suelas de alto agarre o modelos con clavos incorporados. Si prefieres adaptar tus zapatillas existentes, los clavos que se colocan encima pueden ser una solución práctica para mejorar el agarre y la tracción en terrenos resbaladizos.
Seca las zapatillas
Para secar los zapatos durante la noche, retira las plantillas y rellénalos con papel de periódico. Esto facilitará la absorción de la humedad, ayudando a que estén listos para su uso al día siguiente.
Usa buenos calcetines
Los calcetines de lana merina son ideales para mantener los pies cálidos en climas fríos y secos. Para condiciones húmedas o nevadas, los calcetines impermeables, con una capa aislante entre tejidos, son una opción para mantener los pies secos, aunque pueden ser menos transpirables. Es crucial sopesar entre abrigo y ventilación para adaptarse al clima.
Usa ropa como si hiciera más calor
Para correr en clima frío, vístete como si la temperatura fuera más alta de lo real. El calor corporal aumentará mientras corres, por lo que al inicio debes sentirte un poco fresco. Ajustar las capas y anticipar el aumento de temperatura te ayudará a mantenerte cómodo durante la carrera.
Usa la ropa correcta
Selecciona prendas de running con capas y cremalleras en el cuello para ajustar la ventilación. Las zonas de ventilación en las axilas ayudan. Una chaqueta cortaviento es esencial en condiciones ventosas y opta por tejidos que absorban la humedad para mantener la piel seca durante la carrera.
Sé visible para los demás
Cuando las condiciones climáticas o la oscuridad son desafiantes, llevar un faro o linterna es altamente recomendable para mejorar tu visibilidad y seguridad durante la carrera.
Calienta bien
Es crucial calentar antes de correr en invierno. Realiza movimientos ligeros para activar la circulación sanguínea, como saltar la cuerda o subir y bajar escaleras. Este calentamiento te preparará para la carrera sin sudar, asegurando que tu cuerpo esté listo para el esfuerzo en el frío.
Cuidado con el viento
Protege tu piel del viento frío al correr: aplica vaselina o una mascarilla para evitar la incomodidad por la exposición de la piel húmeda. Comienza corriendo contra el viento y finaliza con él a tu espalda para minimizar el efecto sobre tu piel sudada después del ejercicio.
Elige bien la hora
Si es posible, elige la hora más cálida del día para correr en climas fríos, generalmente alrededor del mediodía. Esto te permitirá disfrutar de temperaturas más suaves y puede hacer que la carrera sea más cómoda en comparación con las horas más frías de la mañana o la tarde.
Sé flexible
Si tu horario limita tu tiempo para correr, considera dividirlo en dos sesiones más cortas. Correr por la mañana y por la tarde puede ayudarte a ajustarte a tu agenda, manteniendo la consistencia en tu entrenamiento y maximizando el tiempo disponible para mantener una rutina activa.
Lleva una muda
Llevar ropa de cambio es crucial después de correr en invierno. Tan pronto como termines, cámbiate para evitar enfriarte. Mantener la sequedad y la calidez post-carrera es esencial para evitar el enfriamiento rápido en climas fríos.
Recupera las fuerzas
Después de correr, una bebida caliente o una sopa sustanciosa son excelentes opciones para rehidratarte, recuperar energía y mantener el calor corporal. Estos líquidos reconfortantes son ideales para la recuperación y el restablecimiento de la temperatura corporal después de una carrera en clima frío.
Evita el tiempo extremo
Es prudente evitar correr durante tormentas o ventiscas extremas. Saltarse una sesión es una decisión sensata cuando las condiciones climáticas son peligrosas, priorizando la seguridad sobre el entrenamiento. Siempre hay oportunidades para recuperar la carrera más adelante.