Enviar señales confusas
Los perros tienen una comprensión innata del lenguaje corporal humano y, en muchos casos, lo entienden mejor que nuestras palabras. Aunque pueden aprender comandos verbales como «siéntate», «camina» y «ven», a menudo se guían principalmente por nuestros gestos y expresiones faciales. La comunicación no verbal, como señalar o agacharse, suele ser más efectiva para transmitir nuestras intenciones a nuestros amigos peludos.
Acariciarlos cuando tienen miedo
Cuando un perro está asustado, acariciarlo puede empeorar la situación al reforzar su miedo. Lo más adecuado es darle espacio y mantenerse cerca para brindarle seguridad sin forzar el contacto físico. Esta actitud tranquila y comprensiva ayudará a que el perro se calme gradualmente y sienta que puede confiar en ti en momentos de temor. Cada perro reacciona de manera diferente al miedo, por lo que es esencial adaptarse a sus necesidades individuales y proporcionar el apoyo adecuado sin abrumarlos con caricias no deseadas.
Bañarlos con demasiada frecuencia
Por lo general, a los perros no les agrada demasiado el momento del baño, sobre todo si se hace con mucha frecuencia. Lo recomendable es bañar a tu perro al menos una vez cada tres meses. Si es necesario, puedes hacerlo cada dos semanas, utilizando un champú suave específico para perros, pero no conviene exceder esa frecuencia para no irritar su piel.
Disfrazarlos
Vestir a tu perro puede parecer divertido, pero es esencial estar atento a sus reacciones y comportamientos. Algunos perros pueden sentirse incómodos o estresados con la ropa, lo que se manifiesta en su comportamiento. Si notas signos de malestar, como inquietud o irritación, retira la prenda de inmediato. Es fundamental respetar la comodidad y el bienestar de tu mascota y asegurarte de que cualquier atuendo que le pongas sea adecuado y no le cause estrés.
Ignorarlos cuando llegas a casa
Después de un largo día de espera, tu perro te extraña y anhela tu atención. Aunque estés cansado, dedicarle tiempo y cariño es esencial para fortalecer vuestro vínculo y hacer que se sienta querido y valorado. Un gesto tan simple como unas caricias o jugar juntos puede marcar una gran diferencia en su bienestar emocional y en la calidad de su relación. Además, verás cómo su alegría y emoción al verte son recompensas invaluables que hacen que cualquier cansancio desaparezca.
Obligarles a relacionarse con otros perros
Al igual que a las personas, a los perros tampoco les agradan todos los individuos de su misma especie. No es necesario ni recomendable forzar a tu perro a interactuar con otros perros si no se siente cómodo. Respetar su espacio y sus preferencias es esencial para mantener su bienestar emocional y evitar situaciones tensas o conflictivas. Cada perro tiene su propia personalidad y preferencias, y es importante estar atento a las señales que emite tu mascota para garantizar que se sienta seguro y feliz en su entorno social.
No permitirles atrapar un juguete
Si juegas a lanzar un juguete a tu perro pero constantemente le impides atraparlo, puedes causarle una gran ansiedad. Los perros disfrutan de la satisfacción de alcanzar su objetivo y sentirse exitosos en el juego. Evitar que atrapen el juguete puede generar frustración y confusión en tu mascota. En lugar de eso, anímales a participar en juegos donde puedan disfrutar plenamente de la emoción de atrapar y jugar, fortaleciendo así su vínculo contigo y proporcionándoles un entretenimiento saludable.
Mirarles fijamente a los ojos
El contacto visual sostenido con un perro no siempre es una señal de vínculo. Para ellos, puede interpretarse como una amenaza o un desafío, lo que los hace sentir incómodos y confundidos. Es esencial leer las señales de tu perro y respetar su espacio. En lugar de mantener un contacto visual constante, establece una comunicación tranquila y segura, prestando atención a su lenguaje corporal y asegurándote de que se sienta relajado y en confianza en tu presencia. Esto fortalecerá el vínculo y la relación de forma más efectiva.
No dejarles oler por la calle
Los perros exploran su mundo principalmente a través del olfato. Limitar su capacidad de oler les impide aprender sobre su entorno. Además, puede resultar frustrante para ellos. Por lo tanto, permitir que tu fiel amigo husmee y descubra a través de su nariz es una parte importante de su experiencia diaria.
Olores fuertes
Los perros poseen un olfato asombroso, significativamente más agudo que el de los humanos. Esto significa que los olores fuertes, como el de la lejía, los afectan de manera mucho más intensa que a nosotros. Es importante ser consciente de esto y utilizar productos de limpieza con olores suaves y seguros para mascotas cuando se trata de su entorno, para garantizar su comodidad y bienestar.
Que les toquen las almohadillas de las patas
Las almohadillas de las patas de los perros son una parte gruesa y gomosa que desempeña un papel crucial en su movilidad y protección. Sin embargo, estas áreas son extremadamente sensibles, por lo que manipularlas o tocarlas puede ser incómodo o incluso doloroso para tu mascota. Es importante ser suave y cuidadoso al tratar sus patas, especialmente durante la limpieza o el cuidado. Respetar su comodidad y bienestar es esencial para mantener una relación de confianza con tu perro y asegurarte de que se sienta cómodo en tus manos.
Dejarlos solos
La soledad prolongada puede causar estrés a muchos perros, lo que afecta negativamente su bienestar. Si tu agenda es agitada, considera la posibilidad de contratar a alguien que pueda pasar tiempo con tu mascota y sacarla a pasear para que haga ejercicio. Esto no solo aliviará su ansiedad, sino que también promoverá su salud física y emocional. Tu compromiso con su felicidad y bienestar es esencial para asegurar que tu perro tenga una vida plena y equilibrada, incluso en los días en que estés ocupado.