La visita de Enrique Ponce y Ana Soria a’El Hormiguero’ se ha convertido en uno de los temas de la semana. Tres años después de comenzar su historia de amor, y después de una larga temporada alejados de los focos, la pareja ha reaparecido protagonizando su primera entrevista en televisión. Derrochando complicidad y sin ocultar lo enamoradísimos que están, revelaron cómo se conociertn, pero también ’denunciaron’ lo mal que lo pasaron y lo ’injustamente’ que fueron tratados al principio por parte de los medios de comunicación.
Unas declaraciones que han sido duramente criticadas, ya que el torero ha pasado por alto que cuando comenzó su relación con la joven almeriense todavía estaba casado con Paloma Cuevas -sobre la que no dijo una palabra en el programa presentado por Pablo Motos-, que sufrió muchísimo tanto por su separación como por el alarde de felicidad que Enrique y Ana Soria hicieron en redes sociales en el verano de 2020, cuando salió a la luz su noviazgo.
Algo que no ha pasado por alto Fabiola Martínez que, amiga de Paloma Cuevas, se ha mostrado muy crítica con el valenciano: ’’a Enrique lo aprecio mucho y cuando pasó todo me sentó tan mal las formas* bueno el exhibirse y todo eso, no era necesario en su momento. Ahora, que ya ha pasado tiempo, creo que también Ana tiene derecho, pero creo que se han cebado en algunas cosas que no hacían falta’’. ’’Él tiene dos niñas que estaban escuchando. Hay veces que no se puede ser tan egoísta, entiendo que quiera darle su sitio a Ana, pero hay formas y formas’’ opina.
Para la almeriense, un consejo. ’’Se tiene que ganar su sitio también. Poco a poco te vas ganando el cariño de la gente, te vas a convertir en un personaje público, gánatelo por ti misma y no por demostrar que la persona que has roto su familia y ha engañado a su mujer durante un montón de tiempo, te quiere. Eso no tiene ningún mérito’’ asegura, confesando que pese a todo Ana Soria no le parece ’’mala niña’’.
’’La veo con buen corazón, se enamoró y como ella dijo, el amor es libre y llega. Pero si te justificas con eso es muy pequeña, tiene que viví muchas cosas para entender la magnitud del amor, el amor no son solo las mariposas en el estómago o el enamoramiento que miras los ojos claros en la plaza y te deslumbra, el amor es muchísimo más’’ sentencia.
Un amor que ella confiesa que no le ha llegado tras su separación de Bertín Osborne aunque no se cierra a nada: ’’Estoy abierta a la vida. Al final el amor no se busca, eso llega. Si me llega fenomenal, estaré encantada de la vida, pero de momento estoy abierta a vivir, a disfrutar, a pasármelo bien, a hacer lo que no hacía o dejé de hacer, a darme el capricho de disfrutar’’. ’’De momento el amor no me ha llegado, tampoco lo estoy buscando, simplemente estoy centrada en mí, tengo amor a mí que es el que me faltaba antes pero ahora estoy fenomenal como estoy. Eso se nota, al final todo se refleja en la cara, en los ojos, estoy encantada’’ reconoce.
Y es que como revela, tras su separación de Bertín ’’le he cogido manía a algunas cositas: A la gente caprichosa, a la gente que no es flexible, que no se abre al mundo… Lo que he experimentado en mi vida de casada era una vida muy cuadriculada, él con su trabajo y yo acompañando. Ahora cuando me viene alguien un poco así, muy ABC digo qué pereza. No’’.
Ahora, como asegura, busca ’’un equilibrio’’. ’’De verdad donde está el disfrute no es en que uno se dé al otro o viceversa, sino que cuando tú acompañas a esa persona es porque te apetece y disfrutas de lo que está haciendo. Yo no busco a alguien que esté para mí solamente, no soy así. Me gustan con carácter, me gusta el reto y no me gusta lo fácil’’ confiesa, dejando una pista de qué tiene que tener un hombre para conquistarla.
Fuente: (EUROPA PRESS)