Camilo Blanes se ha convertido en uno de los nombres propios de la crónica social en los últimos días. El pasado sábado, después de varios meses sin noticias suyas, el hijo de Camilo Sesto compartía unas imágenes en redes sociales con aspecto demacrado y una de las famosas pelucas negras de su padre que activaban todas las alarmas sobre su estado de salud.
Una preocupación que no hacía más que aumentar después de que el artista saliese eldomingo a las puertas de su domicilio disparando a la prensa bolas de goma con una pistola de juguete y paseándose en ropa interior con un patinete eléctrico por la zona.
Destrozada, su madre Lourdes Ornelas intervenía en el programa ’Fiesta’ y aseguraba que la vida de su hijo ’’está en peligro’’, reconociendo que nunca había llegado a ’’tal grado de autodestrucción’’. ’’Legalmente no puedo hacer nada. Desconozco a esta persona, ya no puedo hablar con él’’ se lamentaba.
Una caída en picado de Camilín que confirmaba su entorno a la revista Semana, revelando que su vida actual es ’’lamentable’’ y que su casa -la que heredó de su padre en la localidad madrileña de Torrelodones- ’’es un lugar que ha sido devastado y saqueado, un poblado indio en el que solo hay destrucción y caos’’. ’’ Alarmantes informaciones tras las que Camilo ha reaparecido a las puertas de su residencia junto a unos jardineros a los que ha contratado para poner a punto su jardín. Con más peso que en sus últimas apariciones, la peluca negra desaliñada que ha lucido en Instagram estos días y un look estrambótico -con pantalón ajustado de estampado geométrico y camiseta de rayas marineras- el hijo de Camilo Sesto se ha mostrado de lo más pendiente de los trabajadores y ha conversado tranquilamente con alguno de ellos.
Unas imágenes exclusivas con las que el artista ha salido al paso de la preocupación por su estado de salud y ha querido dejar claro que se encuentra perfectamente.
A su lado, sus fans incondicionales, que no han dudado en acercarse hasta las puertas de su casa para mostrarle su apoyo en estos difíciles momentos. Tres señoras que con cadenas con un colgante en forma de pieza de puzzle cada una que al juntarlas se convierten en un corazón con el nombre de Camilo.
’’Soy muy seguidora de él desde hace más de 10 años, tengo su cd que me lo firmó y me lo dedicó con mucho cariño y mi ilusión es verle, pero no quiere verme, no quiere vernos. Hemos llamado a la puerta por si salía’’ ha contado una de ellas mientras que otra le ha pedido ’’que se recupere por él, por su padre y por su madre, que su padre le hubiera gustado verle en otra situación’’. Sus declaraciones, ¡en el siguiente vídeo!
Fuente: (EUROPA PRESS)