Mario Vargas Llosa está disfrutando de una etapa en el que le vemos completamente irreconocible. Acostumbrados a estos últimos años en los que acudía junto a su expareja, Isabel Preysler, a eventos y posaba en los photocall de la manera más tranquila y tímida posible, ahora nos encontramos con un hombre dispuesto a seguir disfrutando de la vida después de este desengaño amoroso.
Este viernes, su hijo Álvaro ha publicado en su perfil de Twitter imágenes en las que podemos ver al Premio Nobel disfrutar de la boda del empresario mexicano, Emilio Camarena y Josefina, la hija de Gonzalo Vargas Llosa. Una celebración familiar en la que Mario ha acudido con toda su familia, incluida por supuesto, Patricia Llosa, con la que podría haber iniciado de nuevo una relación.
Desde que el escritor rompiese su noviazgo con la ’Reina de corazones’ no se ha dejado de hablar de otra cosa de los motivos por los que esta parejaza habría fracasado en el amor… pero sin embargo, los rumores sobre una reconciliación con su exmujer se hicieron más fuertes cuando Mario viajó acompañado por ésta y sus hijos a Francia para ingresar en la Academia Francesa.
Mario está que lo da todo. Su hijo Álvaro nos ha hecho partícipes de cómo ha disfrutado de la boda de su nieta, hasta el punto de que le hemos podido ver bailando un huayno, posando con los novios y con su exmujer Patricia, y disfrutando de charlas interminables con los invitados.
No cabe duda de que el escritor está saboreando uno de los mejores momentos personales que coincide con la reciente ruptura con Isabel. Parece que todo ha vuelto a su sitio y es que sus hijos, en especial, Álvaro, denominada a su madre como ’’la mujer de la vida’’ del escritor… por lo que entendemos que esta segunda oportunidad en el amor le ha devuelto la vida al ’inmortal’.
Fuente: (EUROPA PRESS)