El futbolista lleva dos semanas en la cárcel Brians 2 tras ser acusado de un presunto delito de agresión sexual. Hasta allí se han desplazado grandes amigos que no han dudado en mostrarle su apoyo en estos momentos. El pasado domingo 25 de enero, Bruno Basil acudió a verle, siendo una de las primeras visitas que recibía en prisión.
Hoy, domingo 5 de febrero, era la nueva oportunidad de Dani Alves para recibir visitas. En medio de los rumores que indican que Joana Sanz podría haberle pedido el divorcio, la mujer del futbolista se presentaba en la prisión, demostrando que su relación todavía no ha terminado. Llegaba a mediodía junto a Bruno Basil, cabizbaja y sin ganas de hacer declaraciones.
En esta visita, pudo disfrutar de un vis a vis de cincuenta minutos de duración con su marido. Salía del edificio asegurando que no piensa abandonar a su marido, desmintiendo que su relación vaya a terminar. También aprovechaba para asegurar que Dani Alves no le ha negado ningún vis a vis en las últimas semanas.
Al preguntarle cómo se encontraba ella, respondía con un «estoy bien, gracias» aunque se notaba que no estaba cómoda con la situación, quizás sobrepasada por estar en el foco mediático. Sin embargo, a la hora de preguntarle cómo se encontraba el futbolista, prefirió ser sincera y responder con un «¿ustedes qué creen?» que no dejaba lugar a dudas de lo difícil que están siendo estos días para él.
Queda demostrado, sin ninguna duda, que Joana Sanz no piensa alejarse de su marido, por lo menos de momento. Aunque no aclaró si sigue confiando en la versión de los hechos del futbolista, no entra en sus planes dejar de mostrarle su apoyo, tal y como ha hecho desde 2017 cuando se dieron el ‘sí, quiero’.
Fuente: (EUROPA PRESS)