24 horas después de darse un auténtico baño de masas en su visita a Alicante, la Reina Letizia ha retomado su agenda oficial presidiendo junto al Rey Felipe dos audiencias en el Palacio de la Zarzuela; la primera, a una representación de Cruz Roja Española, y a continuación, al pleno de la Comisión Nacional para la conmemoración del bicentenario de la Policia Nacional.
Dos compromisos para los que ha optado por tirar de fondo de armario y recuperar un vestido que le hemos visto en una decena de ocasiones desde que lo estrenó en diciembre de 2018. Un diseño satinado de la firma francesa Sandro Paris, de estampado tipo pañuelo en diferentes tonos de verde, con escote cruzado y falda plisada que, es innegable, es uno de sus favoritos y ya está más que amortizado.
Un vestido que, como curiosidad, también le hemos visto a otros rostros conocidos como Sonsoles Ónega, Emma García o Patricia Conde y que, versátil a más no poder, Doña Letizia ha combinado esta mañana con unos salones de tacón en color negro.
Como joyas, sus exclusivos pendientes con forma de pluma de Chanel – que no suele lucir muy a menudo a pesar de que iluminan su rostro – y su nuevo anillo favorito, la pieza de Coreterno con inscripción en italiano – «el amor todo lo mueve» – que estrenó en la Pascua Real el pasado 6 de enero y que no se quita desde entonces.
Un look impecable y a juego con el Rey Felipe VI, con una corbata en uno de los verdes del vestido del que, por muchas veces que se lo hayamos visto, ni nos cansamos nosotros ni se cansa Doña Letizia.
Fuente: (EUROPA PRESS)