Con motivo del funeral del Rey Constantino de Grecia, coincidían en la capital griega miembros de la realeza de diferentes países para prestar sus respetos por el monarca. Durante la noche del domingo, los asistentes al funeral aprovecharon la ocasión para reunirse y celebrar una cena en la víspera del acto.
Hoy, tras asistir a la Catedral Metropolitana, donde tenía lugar el funeral, algunos de los asistentes decidían ir a comer juntos al hotel Grande Bretagne de Atenas. Sorprendía la ausencia de los Reyes de España. El resto de la representación de la Casa Real Española si acudió a la comida, mostrando lo unidos que están en estos momentos.
Tras varias horas de comida, Don Juan Carlos y la Reina Doña Sofía salían del hotel con la ayuda de su equipo de seguridad. Froilán le ofrecía el brazo a su abuela para ayudarle a bajar las escaleras, mientras que la infanta Cristina ayudaba a la Princesa Irene de Grecia. La infanta Elena y Victoria Federica fueron las últimas en abandonar el edificio.
La familia se dividió en dos furgonetas para volver al hotel en el que se están hospedando durante su estancia en Atenas. Si algo ha quedado claro durante este viaje, es que las infantas Cristina y Elena han aprovechado la ocasión para ser inseparables. Don Juan Carlos y la Reina Doña Sofía también se han sumado a sus hijas y sus nietos para compartir la experiencia y retomar el tiempo perdido juntos.
Fuente: (EUROPA PRESS)