Una semana después de confirmarse la noticia, la ruptura de Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa sigue dando mucho que hablar. Aunque en los últimos días se ha visto ‘eclipsada’ por la reconciliación de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, son muchas las informaciones que rodean al inesperado fin de una de las parejas más consolidadas del panorama nacional.
Así, a los ‘celos infundados’ del escritor como motivo principal para que la ‘reina de corazones’ rompiese su noviazgo después de 8 años de amor, la revista Lecturas apunta una discusión con la marquesa de Griñón como protagonista como el punto de no retorno en su relación. Según la publicación, las declaraciones que la hija de Isabel hizo en México en octubre hablando de los peligros de los diferentes tipos de sexualidad avergonzaron a Vargas Llosa, cuya relación con Tamara empeoró notablemente a partir de entonces. Un gesto que Preysler interpretó como una falta de apoyo y que acabaría pasádoles factura, puesto que se especula con que habría sido el principio del fin.
Informaciones que el Premio Nobel, en su reaparición después de varios días sin salir de su piso ‘de soltero’ en Madrid, ha evitado aclarar aclarar molesto: «Buenos días. Perdonadme, pero No voy a hacer ninguna declaración, no, no, ninguna» ha respondido a todas las preguntas, dejando en el aire si fue Tamara el detonante de su ruptura.
Lo que sí ha querido desmentir con un escueto «no no» son los rumores de que su negativa a casarse, y los deseos de Isabel de pasar por el altar habrían provocado la crisis que finalmente no han podido superar y tras la que han emprendido caminos separados a punto de celebrar su octavo aniversario de amor.
Un contundente desmentido – «no, no» – que ha repetido para dejar claro que sus supuestos celos tampoco influyeron, como se ha dicho, en su ruptura.
¿Posibilidades de reconciliación con la ‘reina de corazones’? Mario lo tiene claro y revela, con un «sí, sí», que no habrá una segunda oportunidad en su noviazgo. «Cuidado, cuidado, que se va usted a golpear. Mire, no voy a hacer ninguna declaración. Muchísimas gracias» ha respondido a la pregunta de si le desea lo mejor a Isabel, dejando también en el aire si guarda buenos recuerdos de su relación.
Parco en palabras y reiterando que «no voy a hacer ninguna declaración, perdóname», el peruano también se ha pronunciado sobre la reconciliación de Tamara e Íñigo, admitiendo con un dubitativo «sí, sí…» que se alegra por la marquesa.
Tras un largo paseo por los alrededores de su domicilio acompañado por una persona de confianza, don Mario – con ropa deportiva y gorro de lana – ha regresado a casa zanjando las preguntas repitiendo, una vez más, que no piensa hacer declaraciones sobre su ruptura.
Fuente: (EUROPA PRESS)