«Qué día tan triste, qué vacío tan grande y qué injusta es la vida. Cómo duele* Aún no me puedo creer que no vaya a escuchar nunca más tu dulce voz, que no podamos intercambiar canciones de madrugada ni disfrutar de todos los conciertos que nos quedaban por vivir. Hace unos días hablamos por teléfono para despedirnos pero en lo más profundo de mí, tenía la esperanza, igual que tú, de que eso no ocurriera». Así comienza la carta que Sara Carbonero publicaba en sus redes sociales horas después de enterarse del fallecimiento de Elena Huelva.
Grandes amigas desde que sus caminos se cruzaron por casualidad en la Gran Vía madrileña – «no creo mucho en las casualidades pero sí en el destino caprichoso» ha reconocido – la periodista ha querido destacar en su último adiós a la joven influencer, fallecida este 3 de enero tras 4 años de lucha contra un Sarcoma de Ewin, las ganas de vivir que siempre demostró tener a pesar de su dura batalla contra el cáncer: «Nunca he conocido a nadie que amara la vida tanto como tú. Siempre con tu sonrisa, tu gratitud, tu generosidad, tu preocupación por todo el mundo y tus ganas infinitas. Siempre viendo el vaso medio lleno y animando a los demás». «Me has enseñado e inspirado tanto. Me cambiaste la vida» ha confesado.
Una carta en la que Sara se ha lamentado por no haber tenido «algo más de tiempo para bailar» y en la que, revelando que «nada va a ser lo mismo y todo será un poco más oscuro sin tu luz» ha prometido que le hablará a sus hijos de ella, «la amiga más especial y valiente que se puede tener» y una chica que en sus «apenas 20 años de vida comprendió mejor que mucha gente de qué va esto de la vida y nos diste una lección sin pretenderlo». «Dicen que solo muere lo que se olvida. Yo te recordaré eternamente» ha finalizado muy emocionada.
Una despedida muy especial tras la que Sara no ha dudado en viajar de urgencia hasta Sevilla para dar su último adiós a su gran amiga y arropar a la familia de Elena en su velatorio, que ha tenido lugar en el tanatorio de Camas. En torno a las 12.00 horas la periodista llegaba al lugar acompañada por una amiga con un gran ramo de flores en la mano y unas gafas de sol para ocultar su tristeza.
Vestida completamente de negro – a excepción de una bufanda de cuadros bicolor en blanco y negro – la ex de Iker Casillas no ha tenido fuerzas para recordar a la joven influencer y, abatida, se ha limitado a dar las gracias a la prensa por sus condolencias en estos durísimos momentos en los que despide a Elena con su hermana Emi y sus padres, a los que intenta consolar tras la pérdida de la joven que nos dio una lección de vida con su valentía frente al cáncer.
Fuente: (EUROPA PRESS)